En el primer volumen de nuestro texto, de cuyas referencias daremos aquí cuenta bajo el título topsy a modo de tener presente a Freud, nuestro autor Jean Paul Gilson, nos presenta a uno de sus maestros: Jaques Schotte, (1928, Gand – 18 de septiembre 2007) Psiquiatra y psicoanalista Belga, cofundador en 1969 con Antoine Vergote y Alphonse de Waelhens, la Escuela Belga de psicoanálisis, quien con su arduo e insistente trabajo, más que hacer entrar el psicoanálisis a Belgica, lo hace emerger de su trabajo. Digamos que el psicoanálisis es para Schotte un encuentro, producto de su propio trabajo, cuando se pregunta qué es lo que se repite en la serie de las familias que indaga, desde la psiquiatría, bajo el método científico y por entonces, innovador desde el que, además hay hoy, vertientes variadas y diferentes al del psicoanálisis incluso. Autor prolífico a leer cada uno desde su perspectiva, como lo hacemos con cada uno de los maestros, autores, con quienes nos encontramos.
La indagación de Schotte surge de su continuar el trabajo de Léopold Szondi, desde la genética, allí es cuando se encuentra con la pulsión Freudiana y la vida que de ahí en adelante produce para muchos.
Es indagando este autor como nos encontramos con la Escuela Belga de Psicoanálisis y su apuesta de la cual, traducimos hoy, su exposición. Dice así en la bienvenida a la Escuela.
El psicoanálisis atraviesa tiempos difíciles. A veces tiene dificultades para mantenerse en un mundo cada vez más dominado por principios de eficacia económica, mundo en el cual está obligado el psicoanálisis a conformarse bajo un modelo médico que le es extraño. Además, muchos rechazan al psicoanálisis como no científico y por lo tanto poco eficaz. Al mismo tiempo, conflictos internos desgarrán aún muy amenudo el psicoanálisis, amenazado permanentemente por los efectos de la ortodoxia y el dogmatismo que parece dar razón a sus adversarios. ¿Qué papel juega una asociación de y para los psicoanalistas en un contexto tan complicado y dificil?
Desde su fundación, la Escuela Belga de Psicoanálisis ha sido siempre un lugar de reflexión sobre los problemas que acabamos de evocar. Desde que existe, la Escuela se caracteriza por una gran apertura. De entrada sus miembros se negaron a reconocer una ortodoxia cualquiera a fin de privilegiar la clínica más bien que a la ideología. Pero además, su carácter explícitamente bilingue -y más particularmente el diálogo entre dos culturas que por otra parte están estrechamente emparentadas y, cuyo bilinguismo es la expresión- contribuyó a este clima de apertura que siempre caracterizó a la Escuela y que debemos proteger.
Esto no significa de ningún modo, que la Escuela Belga no tenga identidad propia ni que haga del eclecticismo su principal valor. En efecto, la Escuela no hizo nunca un misterio, ni de su pasado, ni de su identidad Lacano-Freudiana, subrayada por otra parte, en su participación activa en la Interasociación Europea de Psicoanálisis. Es precisamente, esta combinación, de una tradición rica y vivaz de la cual toma su identidad y de una apertura aguada, la que pueden hacer de la Escuela Belga de Psicoanálisis, un lguar privilegiado para un debate fecundo sobre el futuro del psicoanálisis ' in dürftiger Zeit ' en estos tiempos áridos.
Este debate debe primero ser llevado con otras corrientes psicoanalíticas entre las cuales hay algunas fuertemente representadas en el seno de nuestra Escuela. Es una fuerza, no una debilidad. Este debate supone también un diálogo abierto entre las comunidades linguisticas que componen la Escuela y en el seno de las cuales se encuentra a veces acentos diferentes tanto en lo que concierne a la práctica clínica como a la formación teórica. La apertura y el debate nos permiten interrogar constantemente, nuestra identidad. Porque toda identidad es algo viviente que es preciso proteger de la inercia.
Este cuestionarse supone igualmente, una discusión permanente con otras disciplinas y dominios científicos que están no siempre bien dispuestos respecto del psicoanálisis. No es sino comenzando esta discusión -con seguridad pero sin arrogancias siempre inadecuadadas-que el psicoanálisis, y por lo tanto nuestra asociación, podrán abastecer la prueba de que tiene suficiente potencial para reinverntarse, sin traicionar sus principios de base, de una manera tal que encuentre la audiencia propia del siglo XXI.
Lovaina, 28 de agosto de 2007.
Philippe Van haute
presidente
Karel Lambers
Vice-presidente.
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traducción, margarita mosquera
Comentario:
Es muy interesante, la apuesta de la escuela Belga, una escuela que está presente, y emerge justamente, del conflicto linguistico en su país más el enorme trabajo como ya dijimos, de sus fundadores, conflicto que dice claramente de la dificultad humana por excelencia, para entenderse, y mucho más, aún, cuando el psicoanálisis le presenta al Hombre, su otro lado, el lado irracional, el lado obscuro que lo determina, ese de LALENGUA, Y EL INCONSCIENTE.
Y esto, este rechazo no es al psicoanálisis, es a lo que éste como en un espejo, le deja ver al Hombre respecto de sus adentros, siempre humanos no obstante, y este rechazo a pesar de que su indagación, del ser, del de-ser, en los humanos, no es sino liberadora, tanto de la palabra como de la vida y de las políticas y éticas absurdas que provee un sistema económico como el que nos arruya en la actualidad y desde hace más de cinco siglos.
El grupo del brasil, coordinado por Caon, justamente trabaja en la cuestión de la Ética, es allí que estamos leyendo a Dante, pues, de cambiar la postura ética del ser humano, quizá, entonces, podamos proveernos de un nuevo y variado sistema económico, que beneficie la vida en el planeta tierra, y ya no a unos cuantos herederos del feudalismo y las monarquías.
La ética del psicoanálisis, es una sugerencia a la humanidad, venida del trabajo riguroso de muchisimos psicoanalistas que a partir de Freud han hecho su labor, con la compañía de Lacan, pero y, como dicen los Belgas, no solamente.... Bravo por eso. La ética pues, surge del trabajo mismo del psicoanálisis, de lo que han logrado elaborar los psicoanalistas a partir del acto analítico, pues, l'a-peti (la arrogancia, pedancia y tiranía) no han ayudado a ningun sistema, sea del saber, del poder o del amor. Petit a, es otra cosa, quizá el bilinguismo el, nuestro, entre el francés mal traducido y el español poco dominado a pesar de ser nuestra lengua (una lengua aprisionada entre el síntoma que sólo escribe sin lograr inscribir la palabra verdadera que tras sí ronda en sus sentidos), nos lleva a confundir los términos. Pero y... hemos de superarlo ¿no es cierto?. Simplemente es dar unas cuantas vueltas de tuerca y... como dice Cenira en uno de sus comentarios a nuestros escritos, con la música de los tres tres tiempos...., lógicos....! (en los link, hay un documento telecargable sobre este tema y una explicación al mismo. así mismo en el de petit a y etc. ).
de ustedes,
Margarita MOSQUERA
Psicoanálisis
Margarita MOSQUERA
Psicoanálisis
57/3168255369
Medellín, Colombia
Medellín, Colombia
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