jueves, 30 de abril de 2009
2.2 seguimiento de lectura volumen I numeral A.
viernes, 17 de abril de 2009
1.1 ¿por qué analizarte?
En esta página http://analiz-arte.blogspot.com/, encontrará material y un recorrido paso a paso, del diario transcurrir en estas cosas del psicoanálisis. Topolicsarte, sera una página que luego estableceremos, pero que está en el fondo de analizarte, quiere significar el arte de la topología de lo inconsciente, lo que en otros términos, es analizarte, y quiere, a través de estos espacios presentar textos de referencia para la lectura de un manual que hemos traducido y que se titula "topología lacaniana: una presentación del sujeto". Texto éste, escrito como tesis de grado por el Dr. Jean Paul Gilson, uno de los fundadores de la escuela en la que me he comprometido, la Escuela Lacaniana de Montreal. Por eso trataremos de presentar también, algunos textos de la escuela, traducidos al español, como los que han estado leyendo en estos días.
Para muchos de los que hemos sido elegidos por el significante psicoanálisis, este texto en nuestro diario recorrer las vías de la lógica, lógica, es decir, las de lo inconsciente, es nuestra música de fondo, nuestro punto de anclaje si se quiere, nuestro polo a tierra.
Para los neófitos que tuvieron la sorpresa de toparse (encontrarse-topología) con esta página, lo inconsciente no les es desconocido, aunque no por serles desconocido sea por ellos no obstante, conocido, y no lo dude.... no en vano llegó aquí.
Lo inconsciente se presenta allí, cuando menos se piensa y dice más de lo que creeríamos que dice: en un sonido, en un tono, en un gesto, en un olvido, en un sueño, en un síntoma, dice de un saber no sabido pero que, no por no sabido está menos presente, hecho éste que nos permite hacerlo consciente.
- - entre el desear y el no querer lo que se desea pero que no por no quererlo, se acta menos -linda fórmula-,
- - allí donde no por querer lo que se desea se acta,
- - y otras muchas fórmulas como éstas propias de cada sujeto.
Se tiene un poco la impresión que Lacan está tratando de preparar un trabajo del que sólo más tarde, se medirá su alcance. Nos libra de manera un poco aforística, no frases o sentencias como los presocráticos, sino dibujos de manera crítica. A partir de lo que se generaliza (Cf. p.
202 supra) en la figura propuesta por Pierre Soury, Lacan cuestiona la relación que existe entre esta figura y otra que le parece invertida, como que muchos tipos de inversión pueden surgir.
Tenemos entonces una precisión a partir de aquí sobre el interés que Lacan tenía por los fenómenos de inversión, de simetría, de disimetría ya que se trata de saber si, esta inversión de dibujos que es propuesta, es una inversión espejo, una inversión como si se diera vuelta a una cesta, una inversión de los encima / debajo, una inversión de malla al derecho, malla al
revés o una inversión entre las líneas de hileras y las líneas de mallas.
Vemos precisarse quizá, el objeto de la interrogación de Lacan. Soury en todo caso, propone considerar que va aquí, de una inversión de objetos que por primera vez él llama, en este seminario, los tejidos de punto tóricos, es decir, una presentación de la borromenidad a través del “modelo del tejido de punto”, o sea, el nudo tejido sobre el toro, forma del toro para portar el borromeo. Muy diferente realizar este borromeo, a través del corte de la superficie propia.
¿Qué busca entonces, Lacan, con estas sutiles especificaciones? " (el subrayado es nuestro)
Es otra pregunta que ha llegado. Hoy en día se analizan, todos aquellos que, de un modo u otro, logran a-cercarce y acceder a este discurso. Discurso analítico, inicialmente nada fácil, por cierto, pues tampoco es fácil hacer consciente lo inconsciente, dado que, justamente, por algo dejamos la tarea sin resolver, porque no era fácil en aquel entonces, nada fácil es el discurso analítico aunque poéticamente sea placentero, pero tampoco es un imposible que no sea inscriptible en los simbólico.
Es la tarea de todo aquel que habiendo accedido a este discurso, responde por sí mismo, con aquello de permitir que ese real recorra los laberintos del lenguaje en lugar de dejarlo engarzado en algún recóndito lugar desde donde a nuestro pesar determina, sin nosotros saberlo, nuestras vidas.
De modo que, todos podemos analizarnos hoy en día, dado que, hay la información requerida, y llevamos ya, 200 años, desde los inicios de esta aventura siempre humana, insistiendo en dar espacio a ese no sabido que insiste en hacerse saber.
Cuál es la diferencia entre psicoanálisis, psicología, psiquiatría y otras lógicas alternativas actuales? Qué decisión tomar a la hora de desear saber sobre si mismo y sus adentros?
Para el psicoanálisis ninguno está enfermo todos somos un sujeto a través del cual su verdad habla al haber del otro lado escuchando, un psicoanalista. Su verdad si bien, es de algún modo la verdad de todos, por eso es posible hacer teoría, pero puesta en su singularidad, es la suya propia y tiene la huella de su andar propio. Ningun analizante es igual a otro, jamás.
Para la psicología usted es un desadaptado y requiere entonces, una serie de sesiones en las cuales su adecuación al medio sea más honerosa. Tanto en psiquiatría como en psicología usted es un organismo. Para la psicología además, un organismo que responde a la manera pavloviana de estímulo-respuesta de modo condicionado por las experiencias vividas.
En las lógicas alternativas, todas, usted es un espíritu religioso, cuyas falencias de esta u otras vidas hacen que se encuentre en dificultades.
Como usted notará, hay diversas opciones, todas ellas igualmente válidas, una se dirige al organismo, otra a la conducta, otra al espíritu, y finalmente, el psicoanálisis, encuentra desde hace 200 años, el hilo de ariadna que desde los griegos se había lanzado; el sujeto.
de ustedes,
- margarita mosquera
- - 57//3168255369 -
- medellín, colombia
jueves, 16 de abril de 2009
10.1.1 MIELM: escuela-fundación. 1996
ELM
Es urgente que los lacanianos se reagrupen en una unidad que los represente en el campo social. Esta necesidad se hace sentir en Montreal desde hace mucho tiempo. Mucha energía se ha orientado ya en este sentido desde hace un cierto número de años: François Péraldi, RSI, Red de carteles, Cirque, Giffric y Clef sobretodo.
Se revela necesario que algunos decidan dar dar la salida para una nueva aventura, la de una "escuela lacaniana de psicoanálisis".
Algunas personas decidieron ocupar este lugar por un tiempo dado, un año o más si es necesario.
Nosotros, los abajo firmantes, pensamos que sería tiempo de ir hasta el final de este camino y de fundar por fin la Escuela Lacaniana de Montreal, (ELM). Hemos convenido lanzar una debate que concretizará la forma y los objetivos de esta escuela, y que se abriría sobre los puntos siguientes:
- Una empresa centrada en el texto y esencialmente en "el texto" de Freud y de Lacan. El uno inventó la cura por la palabra, el otro articuló de ella, as fases capitales hasta promover el camino para hacer existir "del psicoanalista".
No queremos depender de los clivages nacidos de la división entre la enseñanza de Lacan y la herencia de Freud estimando que en Montreal las apuestas son diferentes.
- El Pase existirá en nuestra escuela. No será obligatorio, lejado a la discreción de cada uno, no sería en ningún caso necesario para el reconocimiento institucional.
- El candidato al Pase encontraría su jurado en otras escuelas. ¿Por qué no recibiríamos nosotros del exterior nuestro propio mensaje invertido si es del inconsciente que se trata?
- Esta transmisión reconocida del paso del “ acto analítico ” firmaría el vínculo ético, más allá de toda rivalidad imaginaria, que conecta a los poseedores del discurso analítico sin ninguna necesidad de hacer Internacional.
- La pregunta por el reconocimiento del estatus del analista se haría en el marco de una mutualidad donde el postulante reconocería la escuela como marco de su ejercicio al mismo tiempo que ella lo reconocería como analista según criterios a precisar por un foro.
Va de una restauración de lo que no temeremos llamar dignidada humana cuando se admite que se funda en la falla en el ser de cada uno cuando debe enfrentarse a lo que lo diferencia sexualmetne. Esta verdad tan sesible en la invención lacaniana del Pase se mantendrá como nuestra piedra angular para la experiencia que ésta impone a cada uno.
Karim Jbeili, J.P. Gilson, Martin Pigeon, Maxime-Olivier Moutier, Julie Bellavance, Guy-Robert Saint-Arnaud
.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
fuente: http://www.ecolelacanienne.org/m-ecole/archive/1996-elm.htm 16/04/2009
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
traducción: margarita MOSQUERA
di1version@gmail.com
57//3168255369
medellín, colombia
10.1. MIELM: Escuela-Fundación
2000
• Paction para la ELM (Jean-Paul Gilson)
1998
• Carta abierta a los miembros de la ELM (Jean-Paul Gilson)
1997
• Proposición de noviembre 1997 (Jean-Paul Gilson)• Hacer Escuela: un mito para crear (Alexandra Liva)• El psicoanálisis... (Maxime-Olivier Moutier)• Proposición de textos para el acto de fondación de la ELM (François Couture)• Algunas heregía alrededor del corte (Hélène Colas-Charpentier)• Especificidad de la ELM (Martin Pigeon)• La enseñanza de la ELM (Johanne Lapointe)• Sobre la enseñanza (Martin Pigeon)• La escuela Lacaniana de Montreal nació (Jean-Paul Gilson)• Algunas preguntas... (François Pouppez)• Reflexiones a propósito de la posición ética del analista (Martin Pigeon)• Para una ética (Jean-Paul Gilson)
1996
• ELM (Julie Bellavance, Jean-Paul Gilson, Karim Jbeili, Maxime-Olivier Moutier, Martin Pigeon, Guy-Robert Saint-Arnaud)
Fuente: http://www.ecolelacanienne.org/m-ecole/fondation-top.htm 16/04/2009
-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.
di1version@gmail.com
57//3168255369
medellín, colombia
10.0 MIELM: ¿QUÉ ES LA ESCUELA LACANIANA DE MONTREAL?
Un lugar de formación para psicoanalistas;Una escuela donde hay del acto;Un lugar donde el analista ieu où l’analyste invierte el campo social y toma la palabra.
La ELM se propone ella-misma como objeto de análisis por lo tanto como analizante. La formación de psicoanalistas es el motivo central del trbajo de la ELM. Esta formación comporta muchos Cette formation contiene varios alerones entre los que están: el análisis personal, la enseñanza, el trabajo en cartel y finalmente el pase. La enseñanza bajo forma de seminarios así como el trabajo en cartel, se dirigen tanto a los psicoanalistas en formación como a aquellos que, sin tener el deseo de ocupar la función de analista, se interesan en los textos de Freud y de Lacan. Hay entonces muchos lugares posibles de implicación en la Escuela, sea como miembro de esta, sea como participante en algunas de sus actividades.
Procedimiento para aquellos y aquellas que desean convertirse en miembros de la ELM
Hacer llegar una demanda por escrito a alguno de los miembos de la Escuela explicfando en qué se apoya su deseo para comprometerse en la ELM. El miembro de la ELM que recibe la demanda, repercute esta enseguida a los otros miembros de la Escuela.
Exigencias
1. Estar o haber estado en análisis
2. Obligarse, una vez por año, a dar testimonio de su trabajo en la ELM a través de un decir, un escrito o una producción artística.
3. Hacer parte de un cartel o tener la intención de formar parte de alguno.
4. Participar en la enseñanza de la ELM, sea como asistente de los seminario, sea dando un seminario o incluso haciendo presentaciones.
Toda demanda es aceptada con base en la buena fe y sobre el hecho que las intenciones de la carta no se desmientan. En suma se trata de poner allí de lo suyo, de su palabra en la puesta en causa del discurso analítico.
martes, 14 de abril de 2009
3.4. RSI,Toro, Fantasma
NOTA: PARA CUALQUIER REPRODUCCIÓN, SIRVASE ANOTAR LAS FUENTES, POR FAVOR, Y SOLICITAR PERMISO A MI EMAIL.
no olvide, si gusta los textos en formato pdf, o word, y en doble columna, bilingues para que usted mismo pueda controlar la traducción y por ende su lectura, solicítelos a mi email, el costo de cada texto según su número de páginas, no supera los 5 o 10 pesos y se le envía con su clave personal de apertura, para usted.
jueves, 9 de abril de 2009
3.3 Banda de Moebius, Inconsciente, Estructura
- Se trata de un paso de la representación del Ics al Cs. La representación quedaría la misma, sólo cambiaría su lugar, se desplazaría
O,
- El lugar de la representación no cambiaría, porque es la representación, o su estado lo que cambiaría.
Después, en el Texto, Freud abandona ambas hipótesis diciendo que hay tipos diferentes de representaciones: palabra cosa (wortvorstellung y sachevorstellung). Así, en el Cs encontraríamos ambos, pero en lo Inconsciente habría solamente la representación palabra (sachevorstellung). No obstante, Freud no agota la pregunta, no la concluye suficientemente.
Podemos retomar este tema utilizando la Banda de Moebius. Lacan ya había hecho esto en “Radiofonía” y en el “atolondradicho”, fue seguido por Darmon, Granon-Lafont y, creo, algunos otros autores. Así pues, tenemos la idea de una continuidad entre Cs e Ics. Lo que Abibon nos propone, no obstante, es una novedad para mí. Nos hace pensar en dos tipos De Banda de Moebius: homogénea y heterogénea. La primera correspondería a la estructura de la psicosis y la segunda a la neurósis. Así pues, en la neurosis, habría una parte (creo que podemos trabajar con diferentes colores) que sería el Cs, otra parte que sería el Ics y otra zona mezclada, confusa, entre Cs e Ics. Abibon propone que allí se encuentra el sujeto. Yo, de mi pare pienso, que la zona mezclada podría corresponder al Pr-Cs también. Podemos pensar que los tres diferentes colores se deslizan en la superficie de la banda. Eso me recuerda una balanza. Las personas que están en los diferentes lugares pueden estar más arriba o más abajo, su situación cambia cuando la “gangorra”* se desplaza, pero quedan siempre en el mismo lugar. Es confuso aún para mí… entonces…
*Gangorra: balançoire, balanza, báscula, juego infantil en los parques de diversión.
http://josiasdesouza.folha.blog.uol.com.br/images/gangorra.gif
Vitor Hugo TRISKA.
vitortriska@yahoo.com.br
Brasil
Texto de Richard Abibon
Miércoles 16 de abril de 2008
Quisiera hablar sobre la entrada en análisis como el cierre de una banda de Moebius, lo que sería algo como la apertura de una zona de sueño en un momento de la vela. Se trata de perder las indicaciones dimensionales de la realidad, literalmente bajo la forma de una pérdida de dimensiones por no encontrarse ya más sino en la tercera di-mención[1], la mención
[1] NT: Juego de palabras entre, dimensión (dit-mention) y mención, la dimensión del dicho, diríamos, la mención del decir, de lo que se dice, de lo que pasa por ahí de oídas, a tener efecto en nuestra vida.
del dicho, aquella por la cual las letras depositadas en nuestra memoria inconsciente, las letras muertas, encuentran una nueva vía, perdiendo su estatuto de letra, para acceder al del significante.
El ideal sería formar una banda de Moebius homogénea. Esto no es posible sino con alguien que está en la psicosis, pero allí se presenta otro escollo: esta psicosis tiene a menudo tiene dificultades para convertirse en una psicosis común, una paranoia dirigida, o un autismo a dos, que son las dos formas bajo las cuales Lacan describió la cura analítica.
Pero como el ideal no existe, es más probable encontrar la banda de Moebius como heterogénea, con una parte relativa a la memoria consciente del analista, una parte relativa a su memoria inconsciente y una parte de identificación en la cual no se sabe bien lo que pertenece a una memoria u otra. Allí puede residir la función sujeto.
He aquí un ejemplo de banda de Moebius heterogénea, ciertamente un poco sofisticada. Es importante poder reconocer estas formas topológicas bajo las más distintas apariencias, ya que no se trata de otra cosa que de la estructura del significante, es decir, lo que se funda lo humano: el paso de la Cosa a la representación, aquí representada bajo una forma de enlace destinado a completar la representación, tapando agujeros.
Como siempre, yo hablaría de todo esto en referencia a la práctica.
PREGUNTA: ¿Cómo podría nombrarse de otro modo lo que el muchacho pasa a la niña en el dibujo?
Traduce, margarita MOSQUERA
di1 version@gmail.com
Medellín, Colombia
martes, 7 de abril de 2009
9. ÉTICA
o del sujeto responsable por la deuda simbólica como sujeto del habla y de la escritura
Desde el Brasil con el Dr. Jose Luiz Caon autor de este texto, y los participantes en su espacio de trabajo junto a los que yo laboro, tenemos el tema de la ética en psicoanálisis.
2.1 abril 07, aquí vamos en la lectura
Estamos leyendo psicoanálisis, a partir del texto de Jean Paul Gilson, "Topología Lacaniana: una presentación del sujeto".
Venimos desde SIR, texto de Lacan, 1953, aprendiendo cómo, a través del lenguaje, manifestamos nuestros profundos adentros y que éstos varios registros (como dice Jean Paul), simbólico, imaginario, y real, lo expresan. De lo real poco sabemos, pero podemos decir es lo que hasta ahora el ser humano a tientas y con mucho esfuerzo y trabajo de siglos, ha ido poniendo en pálabras, en lógicas, matemáticas, artes y psicoanálisis muy especialmente con su topología, digamos que lo simbólico es una manera de inscripción de lo real en el lenguaje, y que lo imaginario es parte de este proceso en la medida en que intenta una escritura que no logra inscribirse y que por ello hace síntoma, es decir, repite y repite. Lo simbólico es para nosotros el lenguaje, éste atraviesa lo real en la medida en que dimos el paso de lo instintivo a lo pulsional, de lo que los animales hacen en rituales, por ejemplo, y nosotros hacemos en estructuras de cuya lógica hemos de dar cuenta, nuevamente vamos al sintoma, ese que se repite, ese que se analiza en el diván de un psicoanalista.
El salto en la Lectura de la realidad, con Lacan, se da justamente a través de letras, tal como lógicos, matemáticos, geometras y artistas de todos los tiempos, lo han intentado. Es el intento de inscribir por lo simbólico lo real del síntoma.
Poner en letras cada punto que constituye al nudo borromeo, a la manera de trabajar de lo inconsciente, a eso imaginario, a eso que hace goce, tal y como trabajabamos en el texto del saber sobre el goce a través de la repetición (invitación a la que nos convoca el psicoanálisis con su dispositivo propio para el acto analítico: las sesiones con los psicoanalistas), nos posibilita ese salto hacia lo simbólico y también exorcisar nuestros fantasmas (formación sintomática, digamos por el momento, entre lo imaginario y lo real, susceptible de pasar por la palabras y de ahí entonces a la comprensión lógica de su estructura en lo simbólico. Modo de superarlos al menos, ponerlos a funcionar en la realidad) y desayunar tranquilos...
margarita MOSQUERA
psicoanálisis3168255369
lunes, 6 de abril de 2009
8.1. 18-XI- 53. Jacques Lacan
LECCIÓN I el 18 DE NOVIEMBRE DE 1953
Jacques Lacan
[Sentido del estudio de los textos, y de su enseñanza]
La búsqueda del sentido ya ha sido practicada, por ejemplo por ciertos maestros budistas, con la técnica “zen”. El maestro interrumpe el silencio con cualquier cosa, un sarcasmo, una patada.
Les incumbe a los alumnos mismos buscar la respuesta a sus propias cuestiones en el estudio de los textos; el maestro no enseña ex cátedra una ciencia totalmente hecha sino que aporta esta respuesta cuando los alumnos están a punto de encontrarla.
Esta enseñanza es una negativa de todo sistema, descubre un pensamiento en curso de movimiento, pero sin embargo está preparada para el sistema, porque está obligada a presentar una cierta cara dogmática. El pensamiento de Freud está perpetuamente abierto a revisión. Es un error reducirlo a palabras gastadas inconsciente, superego... Cada noción posee allí su vida propia, lo que precisamente se llama la dialéctica: ella tiene un contrario, etc. Ahora bien, algunas de estas nociones eran, para (ELP 1) Freud, en un momento dado, necesarias: aportaban una respuesta a una cuestión formulada en términos anteriores. No basta con hacer la historia en el sentido de historia del pensamiento y con decir que FREUD apareció en un siglo cientista.
Con la “Ciencia de los sueños”, algo de una esencia diferente, de una densidad psicológica concreta, es reintroducido, a saber el sentido, desde el punto de vista cientista, FREUD pareció reunir allí el pensamiento más arcaico, leer algo en los sueños. Luego, FREUD vuelve a la explicación causal.
Pero cuando se interpreta un sueño, estamos de lleno en el sentido, en algo fundamental del sujeto, en su subjetividad, sus deseos, su relación con de su medio, con los otros, con la vida misma. (-9 afi)
Nuestra tarea es la reintroducción al registro del sentido, registro mismo que hace falta reintegrar a su nivel propio. Brücke, Ludwig, Helmholtz, De Bois-Reymond habían constituido una suerte de fe jurada: todo se reduce a fuerzas físicas, las de la atracción y la repulsión. Cuando se dan estas premisas, no hay ninguna razón para salir de esto. Si Freud salió de eso, es porque se lo dieron otros: se atrevió a pegarse de la importancia de lo que le llegaba, por ejemplo de las antinomias de su infancia, de sus confusiones neuróticas, de sus propios sueños. Es allí dónde Freud está, y es para todos nosotros, un hombre colocado en medio de todas las contingencias más humanas, la muerte, la mujer, el padre. (ELP 2)
Esto constituye una vuelta a los orígenes y merece apenas el título de ciencia. Se va como del buen cocinero, que sabe recortar bien el animal, separar la articulación con la menor resistencia. Para cada estructura, admitimos un modo de conceptualización que le es propio. Entramos no obstante por ahí en la vía de las complicaciones y preferimos volver a la noción monista más simple de deducción del mundo. Sin embargo, hay que darse bien cuenta de que no es con cuchillo que disecamos sino con conceptos: el concepto tiene su orden original de realidad.
Los conceptos no surgen de la experiencia humana, si no estarían bien hechos. Las primeras denominaciones son hechas a partir de las palabras; son instrumentos para delinear las cosas. Así, toda ciencia se queda mucho tiempo en la noche, enredada en el lenguaje. Lavoisier, por ejemplo, al mismo tiempo que su flogistica, aporta el buen concepto, lo oxigena. Hay primero un lenguaje humano totalmente formado para nosotros, del que nos servimos como de un instrumento muy malo. De cuando en cuando se efectúan caídas, de la flogistica al oxígeno. Hay que siempre introducir símbolos, matemáticos u otros, con lenguaje corriente; hay que explicar lo que se va a hacer. Estamos entonces al nivel de un cierto intercambio humano, el del terapeuta, donde Freud se encuentra a pesar de su denegación. Así como Jones lo mostró, Freud se impuso el principio de ascesis de no darse rienda suelta al dominio especulativo a donde fuertemente su naturaleza le llevaba, se sometió a la disciplina de los hechos, del laboratorio; se alejó del mal lenguaje.
Pero consideremos la noción del sujeto: cuando se la introduce, nos introducimos a nosotros mismos; el hombre que les habla es un hombre como otros; se sirve del mal lenguaje.
Desde el origen, Freud sabe que hará progreso en el análisis de las neurosis sólo si él mismo se analiza.
La importancia creciente atribuida a la contra transferencia significa el reconocimiento del hecho de que se es dos en el análisis, no que dos, fenomenológicamente, es una estructura: por ella fenómenos solamente ciertos son aislables, separables. Es la estructura de la subjetividad que les da a los hombres esta idea de que ellos mismos son comprensibles.
Ser neurótico puede servir para hacerse buen psicoanalista: al principio esto le sirvió para Freud. Así como al Señor Jourdain con su prosa, hacemos el sentido, el contrasentido, el disparate. Todavía había que encontrar allí líneas de estructura. Jung también redescubre maravillándose, en los símbolos de los sueños y los símbolos religiosos, los ciertos arquetipos (otra ref) propios de la especie humana: esto también es una estructura.
Freud introdujo otra cosa, el determinismo propio de aquel nivel de estructura. De ahí la ambigüedad que se reencuentra por todas partes en su Obra; ¿por ejemplo, el sueño es deseo o reconocimiento del deseo? O incluso, el ego es a la vez como un huevo vacío, diferenciado en su superficie al contacto del mundo de la percepción y también, cada vez que lo encontramos, el que dice no, o yo (moi); es el mismo del que dice nosotros, que habla de otros, que se expresa bajo estos diferentes registros: vamos a seguir las técnicas de un arte del diálogo; como el buen cocinero, sabemos cuales junturas, cuales resistencias encontramos.
El super ego es también una ley desprovista de sentido pero en contacto con los problemas de lenguaje. Si hablo, si digo « tú tomarás por la derecha », es para permitirle concordar al otro, su lenguaje con el mío, pienso en lo que pasa en su cabeza en el momento en el que le hablo; este esfuerzo de acuerdo es la comunicación pura del lenguaje. Este "tú" es tan fundamental que interviene antes de la conciencia. La censura, por ejemplo, es intencional, juega antes de la conciencia, funciona con vigilancia. Tú no es una señal sino una referencia al otro, es orden y amor.
Del mismo modo el ideal del Yo (Moi) es un organismo de defensa perpetuado por el Yo (Moi) para prolongar la satisfacción del sujeto; es también la función más deprimente, en el sentido psiquiátrico del término.
El Id no es reducible a un puro dato objetivo, a las pulsiones del sujeto; un análisis jamás acabó en tal índice de agresividad o de erotismo; es un cierto punto en la dialéctica del progreso del análisis, el punto extremo del reconocimiento existencial: tú eres esto (tu est ceci), ideal jamás alcanzado por el fin del análisis. No es tampoco la maestría de sí completa, la ausencia de pasión; el ideal es volver al sujeto capaz de sostener el diálogo analítico, de hablar ni demasiado temprano, ni demasiado tarde; es esto a lo que se refiere un análisis didáctico.
La introducción de un orden de determinaciones en la existencia humana, en el dominio del sentido, se llama la razón. El descubrimiento de Freud, es el redescubrimiento, sobre un terreno yermo, la razón.
margarita mosquera.
versión francesa: texto ELP+ALI
Margarita Mosquera.
di1version@gmail.com
Móbil consultorio: 3168255369
Medellín Colombia
7. LA NEGACIÓN
Sigmund Freud.
La forma en que nuestros pacientes producen sus asociaciones espontáneas en el curso de la labor analítica nos procura ocasión de interesantes observaciones. «Va usted a creer ahora que quiero decir algo ofensivo para usted, pero le aseguro que no es tal mi intención.» En semejante manifestación del sujeto vemos la repulsa, por medio de una proyección sobre nuestra persona, de una asociación emergente en aquel momento. O: «Me pregunta usted quién puede ser esa persona de mi sueño. Mi madre, desde luego, no.» Y nosotros rectificamos: «Se trata seguramente de la madre.» En la interpretación nos tomamos la libertad de prescindir de la negación y acoger tan sólo el contenido estricto de las asociaciones. Es como si el paciente hubiera dicho: En ocasiones nos es dado lograr muy cómodamente la aclaración buscada de lo inconsciente reprimido. Preguntamos: «¿Qué es lo que le parece a usted más inverosímil de la situación de que tratamos? ¿Qué es lo que le pareció más extraño y ajeno a usted?» Si el paciente cae en el lazo y designa aquello que más increíble le parece, habrá contestado con ello, casi siempre, la verdad buscada. Un acabado paralelo de este experimento surge frecuentemente en el análisis de los neuróticos obsesivos que han sido ya iniciados en la comprensión de sus síntomas. «A la persona de mi sueño he asociado realmente la de mi madre, pero me disgusta dar por buena tal asociación.»«He tenido una nueva idea obsesiva y en el acto se me ha ocurrido que podía significar tal y tal cosa. Pero no es posible que así sea, pues entonces no podría habérseme ocurrido.» Aquello que el sujeto rechaza con esta motivación, tomada de las explicaciones recibidas durante la cura, es, naturalmente el verdadero sentido de la nueva representación obsesiva.
El contenido de una imagen o un pensamiento reprimidos pueden, pues abrirse paso hasta la conciencia, bajo la condición de ser negados. La negación es una forma de percatación de lo reprimido; en realidad, supone ya un alzamiento de la represión, aunque no, desde luego, una aceptación de lo reprimido. Vemos cómo la función intelectual se separa en este punto del proceso afectivo. Con ayuda de la negación se anula una de las consecuencias del proceso represivo: la de que su contenido de representación no logre acceso a la conciencia. De lo cual resulta una especie de aceptación intelectual de lo reprimido, en tanto que subsiste aún lo esencial de la represión. En el curso de la labor analítica creamos muchas veces una variante importantísima y harto singular de esta situación. Conseguimos vencer también la negación e imponer una plena aceptación intelectual de lo reprimido, pero sin que ello traiga consigo la renovación del proceso represivo mismo. Dado que la misión de la función intelectual del juicio es negar o afirmar contenidos ideológicos, las consideraciones que preceden nos conducen al origen psicológico de esta función. Negar algo en nuestro juicio equivale, en el fondo, a decir: «Esto es algo que me gustaría reprimir.» El enjuiciamiento es el sustitutivo intelectual de la represión, y su «no», un signo distintivo de la misma, un certificado de origen, algo así como el made in Germany. Por medio del símbolo de la negación se liberta el pensamiento de las restricciones de la represión y se enriquece con elementos de los que no puede prescindir para su función.
La función del juicio ha de tomar, esencialmente, dos decisiones. Ha de atribuir o negar a una cosa una cualidad y ha de conceder o negar a una imagen la existencia en la realidad. La cualidad sobre la que ha de decidir pudo ser, originalmente, buena o mala, útil o nociva. O dicho en el lenguaje de los impulsos instintivos orales más primitivos: «Esto lo comeré» o «lo escupiré.» Y en una transposición más amplia: «Esto lo introduciré en mí» y «esto lo excluiré de mí.» O sea: «Debe estar dentro de mí» o «fuera de mí.» El yo primitivo, regido por el principio del placer, quiere introyectarse todo lo bueno y expulsar de sí todo lo malo. Lo malo, lo ajeno al yo y lo exterior son para él, en un principio, idénticos . La otra decisión de la función del juicio, la referente a la existencia real de un objeto imaginado (test de realidad), es un interés del yo real definitivo, que se desarrolla partiendo del yo inicial regido por el principio del placer. No se trata ya de si algo percibido (un objeto) ha de ser o no acogido en el yo, sino de si algo existente en el yo como imagen puede ser también vuelto a hallar en la percepción (realidad). Como puede verse, es ésta, de nuevo, una cuestión de lo exterior y lo interior.
Lo irreal, simplemente imaginado, subjetivo, existe sólo dentro; lo otro, real, existe también fuera. En esta etapa del desarrollo ha dejado ya de tenerse en cuenta el principio del placer. La experiencia ha enseñado que lo importante no es sólo que una cosa (objeto de satisfacción) posea la cualidad «buena» y, por tanto, que merece ser incorporada dentro del yo, sino también que exista en el mundo exterior, de modo que pueda uno apoderarse de ella en caso necesario. Para comprender este progreso hemos de recordar que todas las imágenes proceden de percepciones y son repeticiones de las mismas. Así, pues, originalmente, la existencia de una imagen es ya una garantía de la realidad de lo representado. La antítesis entre lo subjetivo y lo objetivo no existe en un principio. Se constituye luego por cuanto el pensamiento posee la facultad de hacer de nuevo presente, por reproducción en la imagen, algo una vez percibido, sin que el objeto tenga que continuar existiendo fuera. La primera y más inmediata finalidad del examen de la realidad no es, pues, hallar en la percepción real un objeto correspondiente al imaginado, sino volver a encontrarlo, convencerse de que aún existe. Otra aportación a la separación entre lo subjetivo y lo objetivo proviene de una distinta facultad del pensamiento.
La reproducción de una percepción como imagen no es siempre su repetición exacta y fiel, puede estar modificada por omisiones y alterada por la fusión de distintos elementos. El examen de la realidad debe entonces comprobar hasta dónde alcanzan tales deformaciones. Pero descubrimos, como condición del desarrollo del examen de la realidad, la pérdida de objetos que un día procuraron una satisfacción real. El juicio es el acto intelectual que decide la elección de la acción motora, pone término al aplazamiento debido al pensamiento y conduce del pensamiento a la acción. También del aplazamiento, debido al pensamiento, hemos tratado en otro lugar. Debe considerarse como un acto de prueba, como un tanteo motor, con pequeñas descargas psíquicas. Reflexionemos: ¿Dónde llevó antes a cabo el yo un tal tanteo? ¿En qué lugar aprendió la técnica que ahora emplea en los procesos del pensamiento? Ello sucedió en el extremo sensorial del aparato psíquico, en las percepciones sensoriales. Según nuestras hipótesis, la percepción no es un proceso puramente pasivo; el yo envía periódicamente al sistema de la percepción pequeñas cargas psíquicas, por medio de las cuales prueba los estímulos exteriores, retrayéndose de nuevo después de cada uno de estos avances de tanteo.
El estudio del juicio nos procura, quizá por vez primera, un atisbo de la génesis de una función intelectual surgida del dinamismo de los impulsos instintivos primarios. El juicio es la evolución adecuada del proceso primitivo por el cual el yo incorporaba cosas en su interior o las expulsaba fuera de sí, de acuerdo al principio del placer. Su polarización parece corresponder a la antítesis de los dos grupos de instintos por nosotros supuestos. La afirmación -como sustitutivo de la unión- pertenece al Eros; la negación -consecuencia de la expulsión- pertenece al instinto de destrucción. El negativismo de algunos psicóticos debe, probablemente, interpretarse como signo de la defusión de los instintos, por retracción de los componentes libidinosos. Ahora bien, la función del juicio se hace posible por la creación del símbolo de la negación que permite al pensamiento un primer grado de independencia de los resultados de la represión y con ello también de la compulsión del principio del placer. Con esta teoría de la negación armoniza perfectamente el hecho de que en el análisis no hallemos ningún «no» procedente de lo inconsciente, así como el de que el reconocimiento de lo inconsciente por parte del yo se manifieste por medio de una fórmula negativa. La prueba más rotunda de que un análisis ha llegado al descubrimiento de lo inconsciente es que el analizado reaccione al mismo tiempo con las palabras: «En eso no he pensado jamás.»
version Amorrortu editores
---------
Este texto nos sirve de referencia, a la frase que utiliza el Dr Gilson en su texto, seminario uno, página 6 de nuestra traducción, volumen 1, cuando nos enseña como síntesis de este texto que el yo usa a la vez que habla de sí y de los otros, la negación.
no encontré otro texto de Freud donde diga tal frase exclusivamente, me parece es una muy buena (y me disculpo por el juicio) Lectura del autor.
de ustedes,
margarita mosquera
3168255369
medellín, colombia.
domingo, 5 de abril de 2009
3.2 Bach y la pasión
"Si usted mira el libreto, usted va a ver que sólo la parte del evangelista es de textos bíblicos. Todas las Arias son comentarios u oraciones en forma de súplica. Es de praxis que el texto de estas Arias sean escritas por un libretista. Pero a veces Bach enfrentaba dificultades con los libretistas y acababa él mismo escribiendo los textos. Bach compuso en total 5 Pasiones de las cuales sólo la según San Juan (BWV 245, primera presentación en 1724) y la según San Mateo (BWV 244, primera presentación en 1729) habían sido preservadas en su integridad.
La mayor parte de la Pasión según San Marcos se perdió.
En la Pasión según San Juan (BWV 245) la mayor parte es extraída de los capítulos 18 y 19 del Evangelio de San Juan, pero hay algunos injertos del evangelio de San Mateo. Un Tenor desempeña el papel de evangelista y hace los relatos bíblicos en la forma de Recitativos acompañados por el Continuo (generalmente clavo y violoncelo). La manifestación de personajes individuales, inclusive la de Cristo, son desempeñadas por diferentes solistas, y la masa es representada por el coro. Las Arias y los Ariosis entrelazados al texto bíblico representan la reacción del individuo a los hechos relatados. Los corales representan la reacción de la colectividad. La elección de los corales y la elaboración de los textos de las Arias parecen ser del propio Bach. Quizás haya seguido el modelo del libretista llamado Brocke. Pero también hay trechos de texto tomados de J. G. Posyel, cuyo libreto fue musicalizado por Händel a los 19 años de edad, y que era conocida por Bach.
En esta Pasión es particularmente destacable como Bach se esfuerza en describir con la melodía los hechos narrados: la confusión, la desesperación, las lágrimas el conflicto entre masa e individuo en esta pasión.
La pasión según San Mateo (BWV 244, primera presentación en el viernes santo de 1729) representa el auge de la composición de música luterana de Bach. Las partituras fueron manuscritas con particular esmero. Los textos de las arias habían sido encomendados la Pikander. Pero es notorio que hubo sugerencias del propio Bach y hay semejanzas con el texto del poeta Salomo Franck.
En esta Pasión Bach evita los contrastes musicales utilizados en la Pasión según San Juan, y busca evidenciar un clima más amoroso, un sentimiento de luto y espiritualidad que va directo al corazón del oyente. Mientras en la Pasión según San Juan Cristo es presentado como un rey sobrio, en esta (según Mateo) Cristo es más sentimental y humano. El empleo de músicos es mucho mayor: dos orquestas, dos coros y un coro más de niños. El experimentalismo de Bach de arriesgar la mezcla de diferentes estilos de composición es llevada al extremo. Ciertas representaciones musicales son obras primas. Busque escuchar las lágrimas de Cristo a través de dos flautas (N º9), el terremoto (Nº73), la calma de la noche (N º74) en nombre de la paz conquistada por la muerte de Cristo.
Ponga BWV 244 en el YOUTUBE, y usted va a ver que tengo razón. Hay varios trechos disponibles.
Ponga BWV 244 en Google, y usted va a sorprenderse cuantos comentarios hay. La wikipédia tiene hasta una nota sobre Picander, pero siempre es bueno lee el texto en inglés,
Abrazo, todo de bueno
Bernhard Sydow
bernhard_sydow@yahoo.com.br "
Un relator, un solista (protagonista), la masa representada en el coro, la reacción del individuo, la reacción de la colectividad. La confusión entre el individuo y la colectividad. Un poco la solución en la segunda pasión descrita por el autor, en un protagonista más humilde, humano, y un coro de niños.
Sería interesante conocer cómo, el coro, sería el producto de la reacción del individuo y el efecto de su palabra sobre la colectividad. Lo que nos enseñaría sobre el efecto en las masas, de alguna palabra por alguien dada.
El coro en la tragedia griega sirve también de abreación, a la manera de la asociación libre por parte de la masa. Es decir, la interpretación que se da a los hechos un tanto de manera emocional e imaginaria, más que por la lógica de los acontecimientos cuando entonces, lograríamos concluir por lo simbólico algo más que la repetición de un sufrimiento. Es a lo que el psicoanálisis nos invita, a esta última parte de la elaboración de los hechos que en efecto, a través de la historia de la humanidad, nos han causado malestar y que perduran hasta nuestros días.
Es como una fuente la palabra que surge de un alguien que se expande como el agua a través de la repetición que otros hacen de ésta palabra. Por eso, "!ojo con lo que decimos!" puede generar la transformación de todo a nuestro alrededor!
Mi interés en Bach, es la repetición que hace de algunas partes musicales, en varios momentos. No sabría bien cómo decirlo, es su estructura musical, que hace de retorno de lo reprimido en la repetición. No en vano se dedica a la pasión y 5 pasiones, 5 modos de expresar el mismo asunto, con mayor o menor humanidad o divinidad. Según entiendo.
En fin. Gracias por este aporte, pues no sabía que la música de Bach jugara en alguna parte justamente sobre este asunto del goce en la pasión religiosa de la semana santa.
y ahí nos queda para esta semana santa, algo que escuchar y en qué reflexionar.
De parte del profesor Dr. Jose Luis Caon coordinador y fundador, de nuestro grupo amigo del brasil, nos hace sus siempre bienvenidos aportes:
"Viviane y Margarita, aunque esté en deuda con Margarita que me pidió una traducción del brasileño al francés, de un correo electrónico de esos días, postergo la solicitud de ella y continúo escribiendo en brasileño. Acabé de repasar el texto de Bach/Mateus BWV 244, a partir de las fajas de los tres CDS de Bach Edition. Son 39 fajas del primero, 28 del segundo y 37 del tercero, en un total de 104 fajas. Algunas duran algunos segundos. El alemán de los Recitativos es bien accesible; ya el alemán de las reflexiones, mismo esplicando el contexto de la narración del evangelista, son textos bien complejos y algunos merecen examinarlos a la luz de la metapsicología." SemanariodoSeminario@yahoogrupos.com.br, domingo, 05 de abril de 2009 16:19, José Luiz Caon.
Aria [Tenor e Coro] 20 [26] ARIA (Tenor, Coro)
Solista:Quero velar ao lado do meu Jesus!
Coro:Assim se adormecem os nossos pecados
Coro: de este modo se adormecen nuestros pecados.
Solo:Meinen TodBüßet seine Seelennot;Sein Trauren machetmich voll Freuden.
Solista: O sofrimento de sua alma purifica a morte da minha.Seus padecimentosme garantem felicidade.
Solista: El sufrimiento de su alma purifica la muerte de la mía.Sus padecimientosme garantizan.
Coro:Assim um sofrimento que nos redimeé amargo e doceao mesmo tempo.
Cuando en verdad, si hay amor, no hay ni sacrificio ni sufrimiento. Estas, de donde surgen fantasmas, son interpretaciones emocionales de la masa, y deben, ojalá en lo sucesivo, ser llevadas a otro nivel de pensamiento para así, no sólo conocer de la naturaleza humana su sentir, sino superarlo.
Pasión por ejemplo en Bach es superada en la creación musical, donde, la interpretación realizada por los niños, da una nueva versión de los hechos.
Aún así, es preciso ir más adelante, en la elaboración lógica de estas representaciones que toman a tantos niños desde la infancia y los sumergen en un mundo donde amor y sacrificio reinan, con lo que la vida sea hace menos posible de vivir en disfrute como sería lo natural.
Pasión por ejemplo en artistas en general y creadores, es llevada a su máxima entrega en la materia que los ha elegido para expresar su Eso, es un acceso a lo simbólico el que les permite a los creadores, producir desde un significante con el cual se identifican en su empresa, diferentes y variados sentidos. Modo único de proteger la vida, como nos lo decían, el anterior escrito a partir de Freud y Lacan: ponerle límite al goce.
para ello, retomo aquí, algunas frases del anterior escrito:
Bichat define la vida es el conjunto de las fuerzas que resisten a la muerte.
el seno de la experiencia analítica, como una experiencia de discurso.
el camino hacia la muerte no es otra cosa que lo que se llama el goce.
en esta relación primitiva del saber con el goce, donde viene a insertarse ....lo que es del orden del significante.
saber, goce, repetición: el acto analítico, sería desde esta lectura, un saber sobre el goce engendrado por la repetición. Un saber no sabido no obstante y que es en la repetición de ese goce primitivo puesto en actos de palabras (y no en el cuerpo ni en la vida diaria), cómo un día, el analizante descubre su propio centro y propone su propio límite al goce mortífero.
Margarita MOSQUERA,
NOTA: NO OLVIDE REGRESAR A ESTA Y A LAS OTRAS PÁGINAS, LA INFORMACIÓN EN ELLAS CONTENIDA, SE ACTUALIZA DE ACUERDO CON EL AVANCE EN LOS TEMAS DE LA TOPOLOGÍA.
NOTA: PARA CUALQUIER REPRODUCCIÓN, SIRVASE ANOTAR LAS FUENTES, POR FAVOR, Y SOLICITAR PERMISO A MI EMAIL.